Una microreseña para el restaurante Spicy Bombay (C/Sant Pau, 16). Pedimos varios entrantes de verduras samosas y pakora que sirvieron acompañados de tres salsas. De segundo pedimos pollo tandoori y platos de curry, concretamente pedí mi madras especialmente fuerte. El resultado, ignoraron completamente mi petición y el curry estaba demasiado suave. Varias preguntas me viene a la mente. ¿Tendré que volver a ir a Londres para comer un curry como debe ser? ¿Si me dejo bigote y me pego unas sesiones de rayos uV me tomarán en serio?
Un restaurante sencillo con precios económicos pero que nuevamente es incapaz de saltarse las barreras culturales y ofrecer comida picante. Mas información en su web.